La Asociación de Explotaciones Frigoríficas, Logística y Distribución de España (Aldefe) en su último informe consolidado sobre la actividad del sector señala que la ocupación media de los almacenes de productos a temperatura controlada es del 76,53%. La distribución geográfica es, eso sí, irregular.
El pasado ejercicio se cerró con ocupación media de los almacenes de productos refrigerados del 76,53%, cifra sensiblemente inferior a la que se registró en el tercer trimestre de 2022. Con todo, el funcionamiento del sector es positivo tanto al final del pasado ejercicio como en los primeros meses del presente año, si bien queda supeditado de manera clara al alto precio de la energía y a los problemas inherentes al propio sector del transporte y la logística.
En este sentido, se puede observar como la ocupación de los almacenes frigoríficos no es del todo uniforme en el país. Así, por ejemplo, Canarias presenta una ocupación muy alta con una ocupación que supera incluso el 95%, mientras que la zona sur de la península la ocupación es apenas del 65%, muy parecido al que se presenta en la región norte (69,7%). Por su parte, en Cataluña la ocupación es del 73,5%, cifra hasta 12 puntos porcentuales por debajo de lo habitual.
Más allá de estos datos, la tendencia bianual es positiva dentro de la actividad. De hecho, el almacenamiento refrigerado ha mantenido un crecimiento continuado en los dos últimos ejercicios, sobre todo a partir del primer trimestre del 2022. En este sentido, la facturación media ha crecido en un 105%, mismo porcentaje de aumento que se ha registrado en el precio por metro cúbico de almacenamiento.
Por último, haciendo un rápido repaso por el tipo de productos almacenados en las instalaciones a temperatura controlada, los pescados son el producto más demandado con un 19,5% del almacenaje total, seguidos por las carnes en un 18,5% y los productos elaborados, que alcanzan también el 18,5%. Por detrás quedan las verduras, pan y productos derivados, lácteos y los productos farmacéuticos.