La Dirección General de Tráfico (DGT) ya tiene todo listo para poner en marcha a las tres de la tarde de mañana un dispositivo especial para regular, vigilar y dar seguridad a los 4,8 millones de desplazamientos de largo recorrido previstos por carretera en el fin de semana largo por la festividad de Todos los Santos.
Muchos de estos viajes, como recuerda la DGT en un comunicado, se producirán por la visita a los cementerios, por lo que se incrementarán tanto los desplazamientos de corto recorrido como los de larga distancia.
Los principales problemas de circulación se producirán en las salidas de las grandes ciudades y también en las principales vías de comunicación hacia las zonas turísticas y de segunda residencia.
Pese a que la situación del tráfico es muy variable, en periodos tan cortos como el del puente de Todos los Santos, los movimientos de salida y de regreso suelen realizarse en momentos muy concretos.
Tráfico prevé que desde las primeras horas de la tarde del jueves se vaya incrementando el tráfico en sentido salida de los grandes núcleos urbanos, una intensidad que se trasladará según vaya pasando la tarde a las zonas de destino.
Una situación similar se repetirá el viernes por la mañana. Además durante todo el día serán conflictivas las carreteras de acceso a los cementerios de las distintas poblaciones, con motivo de la tradicional visita que en este día se realiza a ellos.
Desde primeras horas de la tarde del domingo la intensidad de vehículos en carretera irá aumentando progresivamente debido al retorno a los lugares de origen.
Por este motivo, se pueden producir retenciones, principalmente en las vías que encauzan todo el movimiento de retorno, sobre todo la red de interés general, autopistas y autovías.
La DGT señala que desplegará todos los medios humanos y materiales a su alcance para vigilar el correcto comportamiento de los conductores y así intentar evitar accidentes.
Además, utilizará las cámaras en carretera para vigilar el uso del cinturón y el móvil al volante, que también controlará la Guardia Civil desde vehículos camuflados.
Se vigilará asimismo el cumplimiento de los límites de velocidad, cuyo control se realizará a través de radares fijos y los móviles que tienen los vehículos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
Desde el aire, la vigilancia se realizará con los helicópteros y drones de los que dispone la DGT, que también intensificará los controles preventivos de alcohol y drogas a cualquier hora del día y en cualquier carretera.
