La Agencia Tributaria ha comenzado a realizar los abonos vinculados a la línea de ayudas al consumo de combustible destinadas a los transportistas autónomos y empresas del sector que no están acogidos a la figura del Gasóleo Profesional.
El Gobierno definió dos métodos de pago para las bonificaciones de la línea de ayudas por litro de combustible de las que se está beneficiando el sector del transporte profesional desde el 1 de enero y hasta el próximo 30 de junio. La primera era la devolución de 20 céntimos por litro de combustible -hasta el 31 de marzo- y de 10 céntimos por litro -hasta el 30 de junio- a través de la figura del Gasóleo Profesional.
Por otro lado, los transportistas excluidos de esta figura del Gasóleo Profesional por tener vehículos de menos de 7,5 toneladas de MMA, así como los transportistas residentes en Ceuta, Melilla y Canarias, tenían que solicitar esta bonificación de manera directa para recibir esta ayuda en un pago único. Una ayuda directa que se abonará mediante un único pago por estimación directa del número de litros aproximado que utilizan los vehículos de cada categoría.
Los importes de estas ayudas directas para los autónomos y empresas de transporte fuera de la figura del Gasóleo Profesional van desde los 450 euros por furgoneta, hasta los 3.690 euros para un camión pesado propulsado por Gas Natural. Además, se ha fijado un importe de 1.000 euros para los dueños de camiones con una Masa Máxima Autorizada que no alcance las 7,5 toneladas. Al existir una fiscalidad diferente en el combustible, todos los transportistas de Ceuta, Melilla y Canarias también ha tenido que acogerse a este método, siendo indistinto el vehículo utilizado.
Ahora, la Agencia Tributaria ha iniciado los pagos de esta línea de ayudas para los autónomos y empresas de transporte que solicitaron la bonificación antes del 31 de mayo, por lo que se estima que la totalidad de los solicitantes recibirán el importe correspondiente a su ayuda en las próximas semanas. Un pago que llega con cierto retraso por la ampliación de las categorías de vehículos beneficiarios, lo que ha llevado a provincias como Álava a adelantar el pago de sus arcas a la espera de la compensación estatal.