El Paquete de Movilidad aprobado por la Unión Europea en verano de 2020 contemplaba la introducción de una nueva generación de tacógrafos inteligentes con geoposicionamiento por satélite el 21 de agosto de 2023.
Ayer, 21 de agosto de 2023, entraba en vigor la normativa que fijaba la instalación del nuevo tacógrafo de segunda generación inteligente en todos los camiones y autobuses de nueva matriculación que se vendieran en la Unión Europea. Sin embargo, la escasez de este tipo de dispositivos ante la lentitud en su homologación y fabricación ha obligado a la Comisión Europea a publicar el Reglamento de Ejecución (UE) 2023/980 por el cual se fija un régimen transitorio para la llegada de este tipo de tacógrafos.
Los tacógrafos inteligentes de segunda generación están pensados para permitir que se lleve a cabo la autenticación de las posiciones registradas mediante geoposicionamiento a través del satélite (GNNS) de Galileo y del servicio abierto que ofrece (OSNMA). El problema es que este servicio OSNMA se encuentra en fase de ensayo público y su introducción con funcionalidades al completo es posterior a la de la llegada de los tacógrafos inteligentes de segunda generación a los nuevos vehículos. Por ello, la homologación y fabricación de estos dispositivos se está retrasando.
Por esta razón, el Reglamento de Ejecución (UE) 2023/980 establece un régimen transitorio de adaptación del software de los tacógrafos inteligentes, así como para su instalación en los nuevos vehículos. Se dibuja así la figura de los tacógrafos de transición, dispositivos que deben garantizar todas las funcionalidades establecidas hasta ahora y una actualización de software para utilizar el geoposicionamiento una vez que esté validado. Los tacógrafos de transición podrán ser homologados hasta el 31 de diciembre de 2023 y podrán ser instalados en vehículos nuevos hasta el 31 de mayo de 2024.
Por si la respuesta de la Unión Europea no era la esperada en este asunto, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana había puesto en marcha un régimen extraordinario de prematriculación para camiones y autobuses con el fin de que las unidades que no puedan ser equipadas con el nuevo tacógrafo inteligente pudieran ser matriculadas con un tacógrafo antiguo hasta el 31 de diciembre de 2023, aunque en términos legales la matriculación figurase en fecha previa al 21 de agosto. Hasta 10.000 vehículos se pueden acoger a esta medida complementaria a la de la Comisión Europea.