España tiene un grave problema de disponibilidad de plazas de aparcamiento de camiones en áreas de estacionamiento seguras. De hecho, las cifras son demoledoras. Nuestro país necesita en torno a cien aparcamientos para vehículos pesados con medidas de seguridad adecuadas para cubrir la demanda de 15.000 plazas que tienen el transporte profesional.
La escasez de plazas de aparcamiento para camiones en instalaciones seguras es un problema generalizado en el sector del transporte de mercancías por carretera en toda Europa. Si a nivel europeo al menos 100.000 conductores profesionales hacen sus descansos diarios cada noche en sitios no acondicionados y sin apenas medidas de seguridad, las cifras en España también son preocupantes. Un reciente estudio de Mowic Truck señala que España tiene un déficit de 15.000 plazas de aparcamiento seguras para camiones.
Este problema se sustenta en dos cuestiones fundamentales. La primera es que España tiene apenas una treintena de aparcamientos con medidas de seguridad en su red viaria, aunque sólo diez áreas tienen la certificación de seguridad de los organismos europeos competentes. La segunda es que estas áreas de estacionamiento seguras, bajo criterio europeo, se sitúan principalmente en Cataluña y País Vasco, lo que dibuja un escenario descompensado con una mayor escasez de plazas de aparcamiento seguras en otros puntos de la geografía.
Según el citado estudio, España necesita al menos unas cien áreas de descanso seguras para vehículos pesados de transporte con certificación de seguridad europea. Estacionamientos que deberían ofrecer unas 15.000 plazas de aparcamiento para cubrir la demanda que actualmente tiene la actividad. Para poner en marcha esta infraestructura y dar respuesta a las necesidades de los conductores profesionales de camión se debería invertir en torno a 500 millones de euros.
A pesar de los movimientos que se están produciendo en esta área, la realidad actual es que en España la disponibilidad de aparcamientos seguros para camiones es muy baja, por lo que los conductores profesionales tienen que realizar sus descansos en aparcamientos que tienen medidas de seguridad limitadas o directamente no cuentan con ellas. Además, también hay un grave problema entre las áreas de servicio que sí tienen medidas de seguridad, ya que algunas de ellas cuentan con instalaciones obsoletas y una oferta de servicios muy limitada.