Los datos de la última edición del Observatorio sobre el Mercado de Trabajo en España colocan al transporte terrestre como una de las actividades con mayor número de vacantes sin cubrir y la profesión de conductor de camión entre las ocupaciones cuyas vacantes presentan mayor dificultad de cobertura durante 2022.
La última edición del Observatorio sobre el Mercado de Trabajo en España pone en el punto de mira al transporte por carretera. En concreto, este informe señala que la profesión de chofer profesional de camión -asalariado- está entre las ocupaciones cuyas vacantes presentan una mayor dificultad de cobertura. Por ende, el transporte terrestre está es la actividad económica de gran relieve en España con un mayor número de vacantes sin cubrir. A su vez, esta situación provoca un sector claramente envejecido.
Que la profesión de conductor asalariado de camión esté entre las ocupaciones cuyas vacantes son más difíciles de cubrir y esto coloque al transporte terrestre en idéntica situación no es casual y se debe a múltiples motivos. Entre los mismos están la falta de competencias técnicas, concretas y falta de cualificación, así como la insuficiente formación o experiencia. Con todo, también hay que tener en cuenta el poco atractivo que despierta la profesión entre las nuevas generaciones.
De hecho, los desacuerdos por las condiciones laborales, salariales, los horarios y la jornada de trabajo también son causa de esta dificultad de cobertura de las vacantes en la actividad, algo que en última instancia se traduce en la escasez flagrante de conductores profesionales que vive el sector. Además, las estadísticas oficiales señalan que el transporte terrestre es una de las actividades económicas más envejecidas del país. El 10% de los afiliados dentro del sector superan los 60 años, lo que supone casi dos puntos por encima de la media.
Una cuestión a tener en cuenta es que no sólo la profesión de conductor de camión vive este envejecimiento, sino también otras categorías profesionales dentro del transporte terrestre. De hecho, el segmento de oficiales de primera y de segunda, categorías profesionales que pueden ser asimiladas a puestos intermedios en los que se requiere una formación media y que concentran el 70% de los afiliados a la Seguridad Social mayores de 60 años que hay en el sector.