El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha confirmado en su mayoría el Paquete de Movilidad, adoptado por el Parlamento y el Consejo de la UE en 2020, pero ha invalidado una de sus disposiciones clave. La obligación de que los vehículos de transporte regresen a su centro operativo cada ocho semanas ha sido considerada desproporcionada, ya que no se ha demostrado su justificación adecuada.
El Paquete de Movilidad fue impugnado por varios Estados miembros, entre ellos Lituania, Bulgaria, Rumanía, Chipre, Hungría, Malta y Polonia, quienes argumentaban que algunas de sus disposiciones perjudicaban a sus empresas de transporte.
Entre los temas debatidos figuraban la prohibición de que los conductores tomaran su descanso semanal regular en el vehículo y la obligación de que los transportistas organizaran el trabajo para que los conductores pudieran regresar a su lugar de residencia o centro operativo cada tres o cuatro semanas.
En su fallo, el TJUE desestimó la mayoría de las reclamaciones de los Estados miembros, afirmando que las medidas adoptadas por el legislador de la UE eran proporcionales a los objetivos de mejorar las condiciones laborales de los conductores y garantizar una competencia justa en el sector del transporte por carretera. El tribunal destacó que el Paquete de Movilidad busca equilibrar la protección social de los conductores con la eficiencia de las empresas transportistas.
Sin embargo, el tribunal anuló la disposición sobre el retorno de los vehículos, concluyendo que el Parlamento y el Consejo no justificaron adecuadamente esta medida, lo que abre la puerta a futuras revisiones de esta normativa clave en el sector del transporte.